Según datos de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del Gobierno español, en España existen más de 3000 playas.
Antes de detallar los tipos de arena, mejor vamos a tirar de la enciclopedia para definir qué es una playa: accidente geográfico que está formado por un gran conjunto de sedimentos de roca que se depositan en la pendiente de la orilla del mar.
Alrededor de un tercio de las costas del planeta están ocupadas por playas de arena.
Los sedimentos de roca determinan el color de las playas.
Vista la definición, uno se puede hacer una idea de porqué hay playas de diferentes colores, y la razón está clara: los sedimentos.
Eso, junto a otros factores como la composición de la zona, las condiciones meteorológicas, la flora y fauna local o las corrientes marinas determinan el color de la arena.
En definitiva, no es más que un conjunto de diferentes rocas y minerales que provienen de las montañas, que tras erosionarse, se trasladan a las playas por ríos y mares y acaban convirtiéndose en polvo, arena o grava.
Cuando pensamos en una playa siempre nos viene a la cabeza un lugar paradisiaco de arena fina blanca o dorada, pero hay arenales sorprendentes de otros colores, algunos de ellos en España.
Empezamos por las que despiertan mayor entusiasmo, las de arena blanca, que deben su color a los sedimentos de piedra caliza, hierro, cuarzo, yeso y feldespato.
Son playas que encontraremos sobre todo en cuencas intertropicales como la mediterránea.
En algunas zonas de Ses Illetes la arena y la orilla presentan un curioso color rosa: son restos de corales.
Este tipo de playas predominan, obviamente, en regiones con grandes arrecifes de coral como son las Bermudas o las Bahamas.
También hay algunas playas de Baleares con arena rosa.
En España no son tan habituales, pero las más conocidas son las de Canarias, que son oscuras porque están compuestas por sedimentos de basalto y obsidiana.
Y acabamos con la que frecuenta nuestras costas, las de arena dorada, pues son habituales en el mar Cantábrico, en diversas zonas del Mediterráneo y en playas del sur de España.
En muchas zonas de España podemos encontrar playas doradas.
El color que adquiere la tierra se debe a la erosión de las conchas y piedras de la zona, donde destacan minerales como el hierro o el cuarzo.
Aunque suelen ser playas de arena fina, todo depende de la fuerza del mar y si arrastra grandes piedras o no.