El Camino de Hierro es una ruta de senderismo única y diferente en la provincia de Salamanca.
Son 17 kilómetros por largos túneles sin iluminación y puentes metálicos de vértigo que arranca en la estación de La Fregeneda y discurre por la antigua vía férrea que une la localidad salmantina de La Fuente de San Esteban con la aldea portuguesa de Barca D’Alva.
El Camino de Hierro transcurre a la vera de los cortados y el cauce del río Águeda, en el Parque Natural de Arribes del Duero, enclave natural singular declarado Reserva de la Biosfera en 2015.
Los diez puentes metálicos que jalonan el trayecto constituyeron una obra de ingeniería titánica del siglo XIX.
El tiempo para completar el Camino se estima entre seis y siete horas de caminata, con un desnivel de bajada de 330 metros y una dificultad de nivel medio.
Tampoco es recomendable para quienes sufran de claustrofobia, ya que algunos de los túneles tienen una distancia considerable; el primero de ellos, a 500 metros de la salida, supera los 1,5 km de longitud.
Los túneles, alguno de más de un kilómetro, se atraviesan provistos de linterna.
Algunos caminantes pueden sentirse intimidados por el vertiginoso discurrir de la ruta, pero su seguridad está salvaguardada por quitamiedos y vallas en los puentes de más altura.
Por motivos de seguridad también se ha fijado un máximo de personas que pueden entrar al Camino de Hierro, 300 al día, por lo que conviene reservar con antelación en la página caminodelhierro.es
Se recomienda llevar agua, crema de protección solar, una gorra o sombrero, algo de alimento y ropa y calzado adecuados para la práctica senderista.