Comunicación: Un salto ruidoso puede ser una forma de enviar señales a otros miembros del grupo.
Juego y socialización: Especialmente entre los delfines, los saltos son una actividad divertida que refuerza los lazos sociales.
Identificación: Cada especie tiene un soplo único en forma y sonido, y a veces individual lo que permite que se reconozcan entre ellos.
Estado: La frecuencia y fuerza del soplo pueden indicar si el animal está relajado, activo o estresado.
Ubicación: En grupos grandes, el soplo ayuda a mantener la unión al permitir a los cetáceos localizarse fácilmente unos a otros.
Advertencias: Un golpe fuerte con la cola, puede ser una señal de advertencia ante una amenaza cercana.
Juego: Similar a los saltos, los aletazos suelen observarse durante interacciones sociales y momentos de juego.
Atracción de atención: Este gesto puede estar dirigido a otros miembros del grupo o incluso a observadores cercanos, como humanos en embarcaciones.